Virgen de la Soledad

2009 "CENTENARIO DE LA CORONACIÓN PONTIFICIA DE LA IMAGEN DE LA VIRGEN DE LA SOLEDAD"
ASÍ LLEGÓ LA IMAGEN DE LA SOLEDAD A OAXACA

Venía un grupo de arrieros, que ya tenían varias semanas de haber salido de Veracruz con destino final: Guatemala. Era la noche del día 17 de diciembre de 1620.
En la madrugada del día siguiente, 18 de diciembre de 1620, de pronto, uno de los arrieros gritó: "patrón, patrón entre las mulas viene una que no es de nosotros". Dicha mula tenía una gran caja atravesada, el patrón respondió: "Al llegar a Oaxaca nos presentamos con el señor alcalde para poner de su conocimiento lo que nos ha sucedido, y que él decida que hacemos con la mulita que traemos de más".
Como a las nueve de la mañana, cuando llegaron a la Ciudad de Oaxaca, al pasar por la ermita de San Sebastián Mártir decidieron tomar un descanso, cuando se dieron cuenta que la mulita que no era de ellos, estaba echada frente a la puerta de la ermita de San Sebastián, trataron de que se levantara, pero todo cuanto hicieron fue inútil. Mandó el dueño de la recua que fueran atraer al señor alcalde, mientras que los otros le quitaban la caraga a la mulita.Ya sin la carga la mulita se sacudió unos pasos y cayó muerta.
A las once de la mañana llegó el alcalde, en compañía del escribano, cuatro empleados y un grupo de curiosos. Al abrir la caja, su sorpresa fue grande pues encima venía una imagen de Nuestro Señor Jesucristo resucitado y una bellícima cabeza y unas finas y delicadas manos, el alcalde dijo: "Esto no es de mi competencia, llamen a una persona de la curia". Así lo hicieron y una persona de estas acudió al lugar del suceso, observó lo que ahí sucedía, notificandolo de inmediato al Señor Obispo Don Bartolomé de Bohórquez e Hinojósa, quien en persona se presentó a dar fe.

Centenario de su Coronación. 18-01-2009

Sacaron la imágen de Nuestro Señor Jesucristo resucitado y a la Santísima Virgen quien traia un letrero que decía "MADRE SANTÍSIMA DE LA SOLEDAD AL PIE DE LA CRUZ". Más tarde el obispo declaró como Patrona de los Oaxaqueños a Nuestra Madre Santísima de la Soledad e instituía para celebrar el acontecimiento cada 18 de Diciembre.
El Señor Obispo determinó que en esa capilla, se quedase la imagen de la Virgen y de la otra ermita bajo la vocación de la Santa Veracruz, la imagen de Jesucristo resucitado se conserva en el actual Templo del Carmen Alto.
En 1682, el capellán Don Fernando Méndez apuró la construcción del templo, habiéndola concluido en 1690, inaugurado y consagrado por el Obispo Sariñana. El aniversario de la consagración del templo se celebra cada 16 de Septiembre. La fachada del templo es una de las más hermosas obras religiosas del estado de Oaxaca. La escultura arquitectónica es una obra de arte, tiene una altura de 24 metros.
Al entrar por la puerta principal, al lado derecho, se encuentra una roca donde se supone fue el lugar en donde se abrió la caja que contenía la imagen de Nuestra Señora de la Soledad. El primer arzobispo de Oaxaca Don Eulogio Guillow, consiguió del Papa Pio X, la Cornación Pontificia de la Madre, Reina y Patrona de los Oaxaqueños, el 18 de Enero de 1909.

Ceremonia Religiosa-Auditorio Guelaguetza-
El Santuario de la Soledad fue elevado a la categoría de Basílica por el Papa Juan XXIII el 17 de Julio de 1959. El Papa Juan Pablo II visitó la Basílica en Enero de 1979.
El Domingo 18 de Enero de 2009, celebramos con una gran fiesta el Centenario de la Coronación Pontificia de la Virgen de la Soledad, con la dirección de Nuestro Arzobispo Don José Luis Chávez Botello.





Fuente: Texto propiedad de la CODIPAJ-ANTEQUERA OAXACA


ORACIÓN


Te bendecimos padre, por que has manifestado tu gran amor a los oaxaqueños, dándonos a María, la madre de tu hijo, en la advocación de Nuestra Señora de la Soledad al pie de la cruz.

Gracias madre santísima por tu presencia en nuestros pueblos, por el amor a tus hijos, por tu interseción en nuestras necesidades, por animar el trabajo de nuestra arquidiócesis.

Celebrando con gozo los 100 años de la coronación Pontificia de tu venerada imagen, queremos en esta ocasión coronarte con nuestra vida y trabajo.

Concédenos imitar tu fortaleza en los momentos de dolor y sufrimiento; ayudanos a construir la paz y fraternidad entre nosotros como nos lo ha pedido tu Hijo Jesús que vive y reina por los siglos de los siglos. Amén.



No hay comentarios: